Autoestima y finanzas
La relación entre la autoestima y finanzas, se trata de un manejo eficiente de las finanzas, es decir, tener una percepción sana y positiva de uno mismo, es mucho más fuerte de lo que podrías creer. Aunque a primera vista no puedas ver una relación directa, ambas variables comparten un factor común: el valor.
En el caso de la autoestima, estás creando un juicio de valor sobre ti mismo, y esto está basado en todas las ideas y conceptos que tengas sobre ti. Un ejemplo es cuando cobras por un trabajo; estás poniendo tu conocimiento en cifras, y si esa autopercepción es baja, se refleja en la forma que cotizas y monetizas tu esfuerzo.
Una de las enseñanzas de la pandemia durante el último año ha sido reconocer y valorar la importancia de la salud mental, así como su impacto en la calidad de vida de cada uno. Al tener tu autoestima en un nivel alto, tu percepción y cuidado del dinero que ingresas será más alto, y por ende, le darás más valor.
¿Cómo se relaciona la autoestima con el dinero?
Cada persona tiene un historial financiero a lo largo de su vida. Este historial está ligado a nuestros recuerdos e historia de vida relacionada con él. Estos recuerdos y experiencias se convierten en juicios que afectan cada decisión en un futuro. La forma en que ves el dinero afecta su manejo; en muchos casos se llega a la adultez con los mismos pensamientos que se formaron en la infancia y adolescencia, los cuales influyen en la forma de administrarse.
Relación con el dinero
Si consideras que no tienes un buen control o relación con tu dinero, el primer paso es mejorar la percepción de ti mismo. Separa los factores externos de lo que sucede en tu interior. Estos factores no te definen, especialmente si son sucesos negativos; es necesario romper con esa dependencia.
Mentalízate y recuerda que el dinero no es algo negativo; a su vez, dale su respectivo lugar y valor a tus necesidades, sin caer en la idea de que puedes reemplazarlas con dinero.
Comienza a valorarte
Hazlo un día a la vez, analizando tus pensamientos y como te tratas a ti mismo. ¿Permitirías que alguien más te tratara como tú te tratas? Cambia todas las percepciones negativas poco a poco; si lo ves necesario, consulta a un profesional. A medida que mejoras la relación contigo mismo, tomarás mejores decisiones y lograrás avanzar a una mejor relación con tus gastos e ingresos.
Recuerda que cada experiencia negativa se puede transformar en una experiencia positiva si extraes aprendizaje de ello. Quien eres ahora, no es la misma persona que eras hace unos años y la forma en que administras tus recursos también evoluciona con tu salud emocional.